En sus poco más de 11 km de recorrido podremos disfrutar de un paisaje de diferentes cultivos (ajo, cereal, vid y olivo), con puntos de interés como la Huerta del Moro, la Laguna Grande, la Laguna del Huevero, la Acequia de los pocillos, la Laguna de la Navazuela, la Acequia de la Navalcudia, el Arroyo del Palomino, el pinar de D. Cayo, la Laguna de Taray, etc. En el trayecto podremos observar un amplio catálogo de aves. Estos valores naturales (aves y vegetación de las zonas húmedas) le hacen formar parte de una ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves), un LIC (Lugar de interés comunitario) y de la Reserva de la Biosfera La Mancha Húmeda.
Las especies observables están en función del año y el tipo de hábitat o ecosistema en el que nos encontremos. Algunas se acercan esporádicamente en sus desplazamientos o migraciones desde zonas próximas, como la Laguna de Manjavacas o el área esteparia de San Clemente.
En los humedales como la Laguna del Taray y la del Huevero (cuando coge una mínima lámina de agua, ya que son estacionales), podemos avistar especies como: porrón común, cigüeñuela común, aguilucho lagunero, gaviota reidora, cuchara común, pato colorado, chorlitejo chico, entre otras. Este tipo de lagunas, también resultan muy interesantes cuando están secas, ya que se convierten en el hábitat perfecto para las aves esteparias como el sisón común, alcaraván (llamado chorlito en la zona, en alusión a su canto), busardo ratonero, cernícalo vulgar, avefría, codorniz común, perdiz roja, rapaces nocturnas (lechuza común, búho chico), etc.
En el siguiente enlace podrás encontrar la topo-guía con el recorrido de la ruta y soporte gráfico: